Cuando ore, deje más bien que su corazón se quede sin palabras en vez de que sus palabras carezcan de corazón. • La oración hará que un hombre deje de pecar o el pecado seducirá a un hombre para que deje de orar. • El espíritu de oración es más precioso que los tesoros de oro y plata. • Ore a menudo, porque la oración es un escudo para el alma, un sacrificio a Dios y un azote para Satanás.