Irlanda, cuando llegó el avivamiento; el pastor presbiteriano del pueblo nos recordaba que “habíamos estado esperando y orando ya bastante tiempo por una bendición especial, pero nos sorprendió grandemente la manifestación tan repentina, tremenda y extraordinaria de la presencia del Espíritu”.17 En el avivamiento las cosas ocurren repentinamente e inesperadamente. Las reuniones se alargan, las multitudes se acercan, y se predica sermón tras sermón, no porque así se haya organizado de antemano sino
Page 33