Los escritores del Antiguo Testamento entendían que Yahvé era un elohim, pero ningún otro elohim era Yahvé. Él era único en su género entre todos los residentes del mundo espiritual. Esto no quiere decir que un elohim no pudiera interactuar con el mundo humano. La Biblia deja claro que los seres divinos pueden (y de hecho lo hacían) tomar forma humana, e incluso la carne corporal, para interactuar con las personas, pero que ese no es su estado normal. Los seres espirituales son “espíritus” (1 Re