El presente trabajo incluye una sección sobre la oración en cada capítulo. Este orden tiene la intención de recordarnos (a quienes enseñamos y predicamos la Palabra de Dios) que debemos pedir la ayuda de Dios en cada paso de nuestra preparación. Como señaló Charles Spurgeon, “Nosotros, los ministros, nunca debemos pasar muchos minutos sin elevar nuestros corazones en oración”. Spurgeon denominó esta oración como “un hábito de la nueva naturaleza por el cual no tenemos más crédito que un bebé por