Lamentablemente, rara vez encontramos personas que pongan atención a lo que la iglesia cree. No obstante, cuando la iglesia fue llamada a la unidad en el Nuevo Testamento, debemos recordar que el apóstol Pablo habló de unidad en estos términos: un Señor, una fe, y un bautismo. Esta unidad no es algo meramente superficial en el sentido de ser una organización unificada o una metodología unificada, sino que, fundamentalmente, es una confesión unificada de fe en la persona y la obra de Cristo. Y en