los síntomas de angustia y luego diagnosticar la dolencia detrás de estos síntomas. Solo después de una observación cuidadosa y un diagnóstico informado, un médico de almas puede proceder, tratando no los síntomas, sino la enfermedad subyacente. La atención y la intención son fundamentales para una pastoreo de calidad. Los pastores primero escuchan con atención con los oídos de Cristo y luego hablan intencionalmente con la boca de Cristo. El cuidado del alma es un ministerio de la Palabra; tiene