El complemento destaca qué se dice acerca del tema. Juntos, el tema y el complemento, forman una idea principal singular. De manera que con la ayuda del Señor, el predicador se esforzará por descubrir la idea principal del texto bíblico y el oyente escuchará una idea bíblica que pueda aplicar en su vida. Explicación: El Espíritu Santo no compite con las Escrituras, al contrario, Él dirigió a sus autores (véase 2 Pedro 1:20–21). Además, facilita la comprensión de las mismas en el proceso del estudio,