Aquí Gálatas no comienza como las demás cartas de Pablo a las iglesias, tales como Efesios o Colosenses. La transición desde el saludo a la parte principal de la carta es ciertamente más abrupta. La mayor parte de las traducciones al idioma español separa, por una buena razón, los versículos 6–10 en un párrafo separado del saludo. El cambio dramático del saludo que lo precede (1:1–5) al asombro de Pablo ante la decisión de los gálatas de apartarse del evangelio es
Galatians 1:6–10