La aflicción existe en nuestras vidas para enseñarnos a obedecer - Es parte de nuestra Santificación. Hebreos 5:8 - Jesús aprendió la obediencia mediante el sufrimiento - leemos “y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia” Hebreos 12:11 - Al momento, ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que por medio de ella han sido ejercitados. Jesús sabía lo que era la aflicción: Isaías 53:3 - El Mesías fue descrito como