He aquí pues un repudio rotundo a la enseñanza actual de que Dios odia el pecado pero ama al pecador. La Escritura dice: ¡«Aborreces a todos los que hacen iniquidad» (Sal 5:5)! «Dios está airado contra el impío todos los días» (Sal 7:11). «El que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él»; no dice «estará», sino que incluso ahora «está sobre él» (Jn 3:36). ¿Puede Dios ‘amar’ a aquel sobre quien está su ‘ira’? Una vez más, ¿no es evidente que las palabras, el «amor