Tu amor, SEÑOR, llega hasta los cielos;
tu fidelidad alcanza las nubes.
Tu justicia es como las altas montañas;
tus juicios, como el gran océano.
Tú, SEÑOR, cuidas de hombres y animales;
¡cuán precioso, oh Dios, es tu gran amor!
Todo ser humano halla refugio
a la sombra de tus alas.
Psalm 36:5–7