Jesús partió de aquel lugar y se fue a la región de Judea y al otro lado del Jordán. Otra vez se le reunieron las multitudes, y como era su costumbre, les enseñaba.
En eso, unos fariseos se le acercaron y, para ponerlo a prueba, le preguntaron:
—¿Está permitido que un hombre se divorcie de su esposa?
—¿Qué les mandó Moisés?—replicó Jesús.
—Moisés permitió que un hombre le escribiera un certificado de divorcio y la despidiera—contestaron ellos.
—Esa ley la escribió Moisés para...
Mark 10:1–52