me pregunto:
«¿Qué es el hombre, para que en él pienses?
¿Qué es el ser humano, para que lo tomes en cuenta?»
Pues lo hiciste poco menos que un dios,
y lo coronaste de gloria y de honra:
lo entronizaste sobre la obra de tus manos,
todo lo sometiste a su dominio;
todas las ovejas, todos los bueyes,
todos los animales del campo,
las aves del cielo, los peces del mar,
y todo lo que surca los senderos del mar.
Psalm 8:4–8