¡Aleluya! ¡Alabado sea el SEÑOR!
Alabaré al SEÑOR con todo el corazón
en la asamblea, en compañía de los rectos.
Grandes son las obras del SEÑOR;
estudiadas por los que en ellas se deleitan.
Gloriosas y majestuosas son sus obras;
su justicia permanece para siempre.
Ha hecho memorables sus maravillas.
¡El SEÑOR es clemente y compasivo!
Da de comer a quienes le temen;
siempre recuerda su pacto.
Ha mostrado...
Psalm 111–118