Entonces los hombres que sabían que sus esposas ofrecían incienso a otros dioses, así como las mujeres que estaban presentes, es decir, un grupo numeroso, y todo el pueblo que vivía en la región sur de Egipto, respondieron a Jeremías:
—No le haremos caso al mensaje que nos diste en el nombre del SEÑOR.
Jeremiah 44:15–16