¿Acaso no ves lo que hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Los niños juntan la leña, los padres encienden el fuego, y las mujeres hacen la masa para cocer tortas y ofrecérselas a la “reina del cielo”. Además, para ofenderme derraman libaciones a otros dioses. Pero no es a mí al que ofenden—afirma el SEÑOR—. Más bien se ofenden a sí mismos, para su propia vergüenza.
Jeremiah 7:17–19