¡Ay, Ariel, Ariel,
ciudad donde acampó David!
Añadan a un año otro año más,
y que prosiga el ciclo de las fiestas.
Pero a Ariel la sitiaré;
habrá llanto y lamento,
y será para mí como un brasero del altar.
Acamparé contra ti, y te rodearé;
te cercaré con empalizadas,
y levantaré contra ti torres de asalto.
Humillada, desde el suelo elevarás tu voz;
tu palabra apenas se levantará del polvo.
Saldrá...
Isaiah 29:1–24