El SEÑOR me dirigió la palabra: «Hijo de hombre: Plantéale al pueblo de Israel este enigma, y nárrale esta parábola. Adviértele que así dice el SEÑOR:
»Llegó al Líbano un águila enorme,
de grandes alas, tupido plumaje y vivos colores.
Se posó sobre la copa de un cedro,
y arrancó el retoño más alto.
Lo llevó a un país de mercaderes,
y lo plantó en una ciudad de comerciantes.
Tomó luego semilla de aquel país
y la plantó en...
Ezekiel 17:1–24