Los dichos de Agur, hijo de Jaqué, contienen el siguiente mensaje.
Cansado estoy, oh Dios;
cansado, oh Dios, y agotado.
Soy demasiado torpe para ser humano
y me falta el sentido común.
No he dominado la sabiduría humana,
ni conozco al Santo.
¿Quién sino Dios sube a los cielos y desciende de ellos?
¿Quién retiene el viento en sus puños?
¿Quién envuelve los océanos en su manto?
¿Quién ha creado el mundo entero?...
Proverbs 30