Cargando…

1 Juan 3:7–17

7Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo. 8El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. 9Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. 10En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios.

11Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros.c 12No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano.d ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas. 13Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece. 14Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida,e en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte. 15Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él. 16En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. 17Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos