Salmo 95:7–10
Y nosotros el pueblo de Su pradoa y las ovejas de Su mano.
Si ustedes oyen hoy Su vozb,
8 No endurezcan su corazón como en Meribaa,
Como en el día de Masahb en el desierto,
9 Cuando sus padres me tentarona,
Me pusieron a prueba, aunque habían visto Mi obra.
10 Por cuarenta añosa me repugnó aquella generación,
Y dije: «Es un pueblo que se desvía en su corazónb
Y no conocen Mis caminos.
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