Romanos 9:9–17
9 Porque la palabra de promesa es ésta: «Por este tiempo volveré, y Sara tendrá un hijoa».
10 Y no solo estoa, sino que también Rebeca concibió mellizos de uno, nuestro padre Isaacb.
11 Porque cuando aún los mellizos no habían nacido, y no habían hecho nada, ni bueno ni malo, para que el propósito de Dios conforme a Su elección permaneciera, no por las obras, sino por Aquel que llamaa,
12 se le dijo a Rebeca: «El mayor servira al menora».
13 Tal como está escrito: «A Jacob amé, pero a Esaú aborrecía».
14 ¿Qué diremos entoncesa? ¿Qué hay injusticia en Diosb? ¡De ningún modoc!
15 Porque El dice a Moisés: «Tendré misericordia del que Yo tenga misericordia, y tendré compasión del que Yo tenga compasióna».
16 Así que no depende del que quiere ni del que correa, sino de Dios que tiene misericordiab.
17 Porque la Escritura dice a Faraón: «Para esto mismo te he levantado, para demostrar Mi poder en ti, y para que Mi nombre sea proclamado por1 toda la tierraa».