Miqueas 7:2–4
2 Ha desaparecido el bondadoso de la tierraa,
Y no hay ninguno recto entre los hombres.
Todos acechan para derramar sangreb,
Unos a otros se echan la redc.
3 Para el mala las dos manos son diestras.
El príncipe pide, y también el juez, una recompensa,
El grande habla de lo que desea su alma,
Y juntos lo tramanb.
4 El mejor de ellos es como un zarzal,
Y el más recto como un seto de espinosa.
El día que pongas tus centinelas,
Tu castigo llegaráb.
¡Entonces será su confusiónc!