Cargando…

Jeremías 29:1–11

29 Estas son las palabras de la carta que el profeta Jeremías envió desde Jerusaléna al resto de los ancianos del destierro, a los sacerdotes, a los profetas y a todo el pueblo que Nabucodonosor había llevado al destierro de Jerusalén a Babilonia.

2 (Esto sucedió después de salir de Jerusalén el rey Jeconías, junto con la reina madre, los oficiales de la corte, los príncipes de Judá y de Jerusaléna, los artífices y los herreros).

3 La carta que fue enviada por mano de Elasa, hijo de Safán, y de Gemarías, hijo de Hilcíasa, a quienes Sedequías, rey de Judá, envió a Babilonia, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, decía:

4 «Así dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel, a todos los desterrados que envié al destierroa de Jerusalén a Babilonia:

5 “Edifiquen casas y habítenlas, planten huertos y coman de su frutoa.

6 ”Tomen mujeres y tengan hijos e hijas, tomen mujeres para sus hijos y den sus hijas a maridos para que den a luz hijos e hijasa, y multiplíquense allí y no disminuyan.

7 ”Y busquen el bienestar1a de la ciudad adonde los he desterrado, y rueguen al Señor por ellab; porque en su bienestar tendrán bienestar”.

8 »Porque así dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: “Que no los engañen sus profetasa, que están en medio de ustedes, ni sus adivinosb, ni escuchen los1 sueños que tienen2c.

9 ”Porque les profetizan falsamente en Mi nombre. Yo no los he enviado”, declara el Señora.

10 »Pues así dice el Señor: “Cuando se le hayan cumplido a Babilonia setenta años, Yo los visitaré y cumpliré Mi buena palabra de hacerlos volver a este lugara.

11 ”Porque Yo sé los planes que tengo1 para ustedesa”, declara el Señorb “planes de bienestar y no de calamidad, para darles un futuro y una esperanzac.

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos