Cargando…

2 Timoteo 1:3–8

Fidelidad y dinamismo en el servicio cristiano

3 Doy gracias a Diosa, a quien sirvob con limpia concienciac como lo hicieron mis antepasados1, de que sin cesar, noche y día, me acuerdo de ti en mis oraciones2d,

4 deseando vertea, al acordarme de tus lágrimasb, para llenarme de alegría.

5 Porque tengo presente1 la fe sincera que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loidaa y en tu madre Euniceb, y estoy seguro que en ti también.

6 Por lo cual te recuerdo que avives el fuego del don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manosa.

7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardíaa, sino de poder, de amor y de dominio propio.

8 Por tanto, no te avergüencesa del testimonio de nuestro Señorb, ni de mí, prisionero Suyoc, sino participa conmigo en las afliccionesd por el evangelio, según el poder de Diose.

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos