Cargando…

2 Corintios 8:1–15

8 Ahora, hermanos, les damos a conocer la gracia de Dios que ha sido dadaa en las iglesias de Macedoniab.

2 Pues en medio de una gran prueba de aflicción, abundó1 su gozo, y su profunda pobreza sobreabundó en la riquezaa de su liberalidad.

3 Porque yo testifico que según sus posibilidadesa, y aun más allá de sus posibilidades, dieron de su propia voluntad,

4 suplicándonos con muchos ruegos el privilegio1 de participar en el sostenimiento de los santosa.

5 Y esto no como lo habíamos esperado, sino que primeramente se dierona a sí mismos al Señor, y luego a nosotros por la voluntad de Diosb.

6 En consecuencia, rogamos a Titoa que como él ya había comenzado antesb, así también llevara a cabo en ustedes esta obra de graciac.

7 Pero así como ustedes abundana en todo: en fe, en palabra, en conocimiento, en toda solicitud, y en el amor que hemos inspirado en ustedes1, vean que también abundena en esta obra de graciab.

8 No digo esto como un mandamientoa, sino para probar1, por la solicitud de otros, también la sinceridad del amor de ustedes.

9 Porque conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristoa, que siendo rico, sin embargo por amor a ustedes se hizo pobre, para que por medio de Su pobrezab ustedes llegaran a ser ricos.

10 Doy mi opinióna en este asunto, porque esto les conviene a ustedes, que fueron los primeros en comenzar hace un añob no solo a hacer esto, sino también a desear hacerlo.

11 Ahora pues, acaben también de1 hacerlo; para que como hubo la buena voluntada para desearlo, así también la haya para llevarlo a cabo según2 lo que tengan.

12 Porque si hay1 buena voluntad, se acepta según lo que se tiene, no según lo que no se tienea.

13 Esto1 no es para holgura de otros y para aflicción de ustedes, sino para que haya igualdad.

14 En el momento actual la abundancia de ustedes suple la necesidad de ellos, para que también la abundancia de ellos supla1 la necesidad de ustedesa, de modo que haya igualdad.

15 Como está escrito: «El que recogió mucho, no tuvo demasiado; y el que recogió poco, no tuvo escaseza».

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos