Romanos 6:5–10
5 Porque si hemos sido unidos1 a Él en la semejanza2 de su muertea, ciertamente lo seremos también en la semejanza de su resurrección,
6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombrea fue crucificado con Élb, para que nuestro cuerpo de pecadoc fuera destruido1, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado;
7 porque el que ha muerto, ha sido libertado1 del pecadoa.
8 Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con Éla,
9 sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de entre los muertosa, no volverá a morir; ya la muerte no tiene dominio sobre Élb.
10 Porque por cuanto El murió, murió al pecado de una vez para siempre; pero en cuanto vive, vive para Dios.