Y llamó a sí a la gente, juntamente con sus discípulos, y les dijo:
—Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará. Pues, ¿de qué le sirve al hombre ganar el mundo entero y perder su alma? Porque, ¿qué dará el hombre en rescate por su alma? Pues el que se avergüence de mí y de mis palabras
Mark 8:34–9:1