Al octavo día Moisés llamó a Aarón y a sus hijos, y a los ancianos de Israel. A Aarón le dijo: «Toma un becerro para el sacrificio expiatorio y un carnero para el holocausto, ambos sin defecto, y preséntaselos al SEÑOR. Diles después a los israelitas: “Traigan un macho cabrío para el sacrificio expiatorio, y un becerro y un cordero para el holocausto, ambos de un año y sin defecto. Traigan también un toro y un carnero para ofrecérselos al SEÑOR como sacrificio de comunión; y traigan una...
Leviticus 9:1–24