»Si en algún campo de la tierra que el SEÑOR tu Dios te da en posesión se halla un muerto, y no se sabe quién pudo haberlo matado, tus ancianos y tus jueces irán y medirán la distancia que haya entre el cuerpo y las ciudades vecinas. Entonces los ancianos de la ciudad más cercana al muerto tomarán una becerra, a la cual nunca se le haya hecho trabajar ni se le haya puesto el yugo. La llevarán a algún valle donde no se haya arado ni plantado, y donde haya un arroyo de aguas continuas, y allí...
Deuteronomy 21:1–23