¡No sucede lo mismo con los malos!
Son como paja inútil que esparce el viento.
Serán condenados cuando llegue el juicio;
los pecadores no tendrán lugar entre los justos.
Pues el SEÑOR cuida el sendero de los justos,
pero la senda de los malos lleva a la destrucción.
Psalm 1:4–6