Cargando…

Jueces 4:17–21

17 Pero Sísara huyó a pie a la tienda de Jael, mujer de Heber el quenita. Porque había paz entre Jabín, rey de Hazor, y la casa de Heber el quenita.

18 Jael salió al encuentro de Sísara, y le dijo: «Venga1, señor mío, venga1 a mí; no tema». Y él fue2 hacia ella a la tienda, y ella lo cubrió con una manta.

19 Y él le dijo: «Te ruego que me des a beber un poco de agua, porque tengo sed». Y ella abrió un odre de leche y le dio de bebera; entonces lo cubrió.

20 Y él le dijo: «Ponte a la entrada de la tienda, y si alguien viene y te pregunta: “¿Hay alguien aquí?”, tú responderás: “No”».

21 Pero Jael, mujer de Heber, tomó una estaca de la tienda y tomando1 en la mano un martillo, se le acercó silenciosamente y le clavó la estaca en las sienesa, la cual penetró en la tierra, pues él estaba profundamente dormido y agotado, y murió.

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos