Cargando…

Deuteronomio 22–25

Capitulo 22

Leyes diversas

No verás extraviado el buey de tu hermano1, o su oveja, sin que te ocupes de ellos2; sin falta los llevarás a tu hermanoa.

2 Y si tu hermano no vive cerca de ti, o si no lo conoces, entonces lo traerás a tu casa, y estará contigo hasta que tu hermano lo busque; entonces se lo devolverás.

3 Así harás con su asno, y asimismo harás con su vestido; lo mismo harás con cualquier cosa perdida que tu hermano haya perdido y que tú halles. No te es permitido ignorarlos1.

4 No verás el asno de tu hermano, o su buey, caído en el camino sin ocuparte de ellos1; sin falta le ayudarás a levantarlos.

5 La mujer no vestirá ropa de hombre, ni el hombre se pondrá ropa de mujer; porque cualquiera que hace esto es abominación al Señor tu Dios.

6 Si encuentras un nido de pájaros por el camino, en un árbol o en la tierra, con polluelos o con huevos, y la madre echada sobre los polluelos o sobre los huevos, no tomarás la madre con los hijosa;

7 sin falta dejarás ir a la madre, mas a los hijos los puedes tomar para ti, para que te vaya bien y prolongues tus díasa.

8 Cuando edifiques casa nueva, harás pretil a tu azotea, para que no traigas culpa de sangre sobre tu casa si alguno se cayera de ella.

9 No sembrarás tu viña con dos clases de semillaa, no sea que todo el fruto1 de la semilla que hayas sembrado y el producto de la viña queden inservibles2.

10 No ararás con buey y asno juntosa.

11 No vestirás ropa de material mezclado de lana y linoa.

12 Te harás borlas en las cuatro puntas del manto con que te cubrasa.

Leyes sobre la moralidad

13 Si un hombre toma a una mujer y se llega a ella, y después la aborrecea,

14 y la acusa de actos vergonzosos y la difama públicamente1, diciendo: «Tomé a esta mujer, pero al llegarme a ella no la encontré virgen»,

15 entonces el padre y la madre de la joven tomarán las pruebas de la virginidad de la joven y las llevarán1 a los ancianos de la ciudad, a la puerta.

16 Y el padre de la joven dirá a los ancianos: «Di mi hija por mujer a este hombre, pero él la aborreció;

17 y he aquí, él le atribuye actos vergonzosos, diciendo: “No encontré virgen a tu hija”. Pero esta es1 la prueba de la virginidad de mi hija». Y extenderán la ropa delante de los ancianos de la ciudad.

18 Y los ancianos de la ciudada tomarán al hombre y lo castigarán,

19 y le pondrán una multa de cien siclos1 de plata, que darán al padre de la joven, porque difamó públicamente a2 una virgen de Israel. Y ella seguirá siendo su mujer; no podrá despedirla en todos sus días.

20 Pero si el asunto es verdada, que la joven no fue hallada virgen,

21 entonces llevarán a la joven a la puerta de la casa de su padre, y los hombres de su ciudad la apedrearán hasta que muera, porque ella ha cometido una infamia en Israel prostituyéndose en la casa de su padrea; así quitarás el mal de en medio de tib.

22 Si se encuentra a un hombre acostado con una mujer casada, los dos morirána, el hombre que se acostó con la mujer, y la mujer; así quitarás el mal de Israel.

23 Si hay una joven virgen que está comprometida a un hombre, y otro hombre la encuentra en la ciudad y se acuesta con ellaa,

24 entonces llevaréis a los dos a la puerta de esa ciudad y los apedrearéis hasta que mueran; la joven, porque no dio voces en la ciudad, y el hombre, porque ha violado a la mujer de su prójimo; así quitarás el mal de en medio de ti.

25 Pero si el hombre encuentra en el campo a la joven que está comprometida, y el hombre la fuerza y se acuesta con ella; entonces morirá solo el que se acuesta con ella,

26 no harás nada a la joven; no hay en la joven pecado digno de muerte, porque como cuando un hombre se levanta contra su vecino y lo mata, así es este caso;

27 cuando él la encontró en el campo, la joven comprometida dio voces, pero no había nadie que la salvara.

28 aSi un hombre encuentra a una joven virgen que no está comprometida, y se apodera de ella y se acuesta con ella, y son descubiertos,

29 entonces el hombre que se acostó con ella dará cincuenta siclos de plata al padre de la joven, y ella será su mujer porque la ha violado; no podrá despedirla en todos sus días.

30 1Ninguno tomará a la mujer de su padre para que no descubra la vestidura de su padrea.

Capitulo 23

Los excluidos de la asamblea

Ninguno que haya sido castrado1 o que tenga cortado su miembro virila entrará en la asamblea del Señor.

2 Ningún bastardo entrará en la asamblea del Señor, ninguno de sus descendientes, aun hasta la décima generación, entrará en la asamblea del Señor.

aNingún amonita ni moabita entrará en la asamblea del Señor; ninguno de sus descendientes, aun hasta la décima generación, entrará jamás en la asamblea del Señor,

4 porque no fueron a vuestro encuentro con pan y agua en el camino cuando salisteis de Egipto, y porque alquilaron contra ti a Balaam, hijo de Beor, de Petor en Mesopotamia1, para maldecirtea.

5 Mas el Señor tu Dios no quiso escuchar a Balaam, sino que el Señor tu Dios te cambió la maldición en bendicióna, porque el Señor tu Dios te amab.

6 Nunca buscarás su paz ni su prosperidad en todos tus díasa.

7 No aborrecerás al edomita, porque es tu hermanoa; no aborrecerás al egipcio, porque fuiste extranjero1 en su tierrab.

8 Los hijos de la tercera generación que les nazcan podrán entrar en la asamblea del Señor.

Leyes diversas

9 Cuando salgas como ejército1 contra tus enemigos, te guardarás de toda cosa mala.

10 Si hay en medio de ti un hombre inmundo a causa de una emisión nocturnaa, debe salir fuera del campamento; no volverá a entrar al1 campamento.

11 Pero1 al llegar la tarde se bañará con agua, y cuando se ponga el sol, podrá entrar de nuevo al2 campamento.

12 Tendrás también un lugar fuera del campamento y saldrás allí;

13 y tendrás entre tus herramientas una pala1, y2 cuando te sientes allá fuera, cavarás con ella, y te darás vuelta para cubrir3 tu excremento.

14 Porque el Señor tu Dios anda en medio de tu campamentoa para librarte y para derrotar1 a tus enemigos de delante de ti, por tanto, tu campamento debe ser santob; y Él no debe ver nada indecente2 en medio de ti, no sea que3 se aparte de ti.

15 No entregarás a su amo un esclavo que venga1 a ti huyendo de su señora.

16 Contigo habitará en medio de ti, en el lugar que él escoja en una de tus ciudades1 donde le parezca bien; no lo maltratarása.

17 Ninguna de las hijas de Israel será ramera de culto paganoa; tampoco ninguno de los hijos de Israelb será sodomita de culto pagano.

18 No traerás la paga de una ramera ni el sueldo de un perro1a a la casa del Señor tu Dios para cualquier ofrenda votiva2, porque los dos son abominación para el Señor tu Dios.

19 No cobrarás interés a tu hermano1a: interés sobre dinero, alimento, o cualquier cosa que pueda ser prestado a interés.

20 Podrás cobrar interés a un extranjero, pero a tu hermano1 no le cobrarás interésa a fin de que el Señor tu Dios te bendiga en todo lo que emprendas2b en la tierra que vas a entrar para poseerla.

21 Cuando hagas un voto al Señor tu Dios, no tardarás en pagarloa, porque el Señor tu Dios ciertamente te lo reclamará, y sería pecado en ti.

22 Sin embargo, si te abstienes de hacer un voto, no sería pecado en ti.

23 Lo que salga de tus labios, cuidarás de cumplirlo, tal como voluntariamente has hecho voto al Señor tu Dios, lo cual has prometido1 con tu boca.

24 Cuando entres en la viña de tu prójimo, entonces podrás comer las uvas que desees hasta saciarte1, pero no pondrás ninguna en tu cesto2.

25 Cuando entres en la mies de tu prójimo, entonces podrás arrancar espigas con tu mano, pero no meterás la hoz a la mies de tu prójimoa.

Capitulo 24

Cuando alguno toma una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable1 porque ha encontrado algo reprochable en ellaa, y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casab,

2 y ella sale de su casa y llega a ser mujer de otro hombre;

3 si el segundo marido la aborrece y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa, o si muere este último marido que la tomó para ser su mujer,

4 al primer marido que la despidió no le es permitido tomarla nuevamente como mujer, porque ha sido menospreciada1; pues eso es abominación ante el Señora. No traerás pecado sobre la tierra que el Señor tu Dios te da por heredad.

5 Cuando un hombre es recién casado1, no saldrá con el ejército, ni se le impondrá ningún deber; quedará libre en su casaa por un año para hacer feliz a la mujer que ha tomadob.

6 Ninguno tomará en prenda el molino de mano ni la muela del molino, porque sería tomar en prenda la vida del hombre.

7 Si se encuentra a un hombre que haya secuestrado1 a alguno de sus hermanos2 de los hijos de Israel, y lo haya tratado con violencia, o lo haya vendido, entonces ese ladrón moriráa; así quitarás el mal de en medio de ti.

8 Cuídate de una infección1 de lepra, para que observes diligentemente y hagas conforme a todo lo que los sacerdotes levitas os enseñen; como les he ordenado, así cuidaréis de hacera.

9 Recuerda lo que el Señor tu Dios hizo a Miriam en el camino, cuando salíais de Egiptoa.

10 Cuando prestes cualquier cosa1 a tu prójimo, no entrarás en su casa para tomarle prendaa;

11 te quedarás afuera, y el hombre a quien hiciste el préstamo te traerá la prenda.

12 Y si es un hombre pobre, no te acostarás reteniendo aún su prenda;

13 sin falta le devolverás la prenda al ponerse el sola, para que se acueste con su ropa, y te bendiga; y te será justicia delante del Señor tu Diosb.

14 No oprimirás al jornalero pobre y necesitado, ya sea uno de tus conciudadanos1a o uno de los extranjeros2 que habita en tu tierra y en tus ciudades3.

15 En su día le darás su jornal antes de la puesta del sol1a, porque es pobre y ha puesto su corazón2 en él; para que él no clame contra ti al Señor, y llegue a ser pecado en tib.

16 Los padres no morirán por1 sus hijos, ni los hijos morirán por1 sus padres; cada uno morirá por su propio pecadoa.

17 No pervertirás la justiciaa debida al1 forasterob ni al1 huérfano, ni tomarás en …

Leer más



Un servicio de Software Bíblico Logos