Azarías hijo de Osaías, Johanán hijo de Carea y todos los hombres arrogantes dijeron a Jeremías:
—¡Dices mentiras! No te ha enviado Jehovah nuestro Dios, para decir: "No entréis a Egipto para residir allí"; sino que Baruc hijo de Nerías te incita contra nosotros, para entregarnos en mano de los caldeos, a fin de que nos maten o que nos lleven cautivos a Babilonia.
Así que Johanán hijo de Carea, todos los oficiales de los soldados y todo el pueblo no obedecieron la voz de Jehovah,
Jeremiah 43:2–7