Porque YHVH tu Dios te conduce a una tierra excelente, tierra de arroyos de aguas, de fuentes y manantiales, que brotan en la planicie y en la montaña.
Tierra de trigo y de cebada, de vides, de higueras y granados, tierra de aceite, de olivas y de miel.
Tierra en la cual no comerás el pan con escasez ni en ella te faltará nada. Tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes extraerás el cobre.
Y siempre que comas y te sacies bendecirás a YHVH tu Dios por la buena tierra que te habrá
Deuteronomy 8:7–10