Job 2:4–8
4 Satanás respondió al Señor: «¡Piel por piel! Sí, todo lo que el hombre tiene dará por su vida.
5 »Sin embargo, extiende ahora Tu manoa y toca su hueso y su carne, verás si no te maldice en Tu misma carab».
6 Y el Señor dijo a Satanás: «Él está en tu mano; pero respeta su vida».
7 Entonces Satanás salió de la presencia del Señor, e hirió a Job con llagas malignas1 desde la planta del pie hasta la coronillaa.
8 Y Job tomó un pedazo de teja para rascarse mientras estaba sentado entre las cenizasa.