Apocalipsis 22:1–5
22 Después el ángel me mostróa un ríob de agua de vidac, resplandeciente como cristald, que salía del trono de Dios y del Cordero,
2 en medio de la calle de la ciudad1a. Y a cada ladob del río estaba el árbol de la vidac, que produce doce clases de fruto, dando su fruto cada mes; y las hojas del árbolb eran para sanidad de las naciones.
3 Ya no habrá más maldicióna. El trono de Dios y del Corderob estará allí1, y Sus siervos le serviránc.
4 Ellos verán Su rostroa y Su nombreb estará en sus frentesc.
5 Y ya no habrá más nochea, y no tendrán1 necesidad de luz de lámparab ni de luz del sol, porque el Señor Dios los iluminará, y reinarán por los siglos de los siglosc.